¿VOLVEREMOS A CRECER?

Edición 100 | Martes, Marzo 19, 2024 - 11:02

POR: ECONOMÍA PARA LA PIPOL: VALERIE CIFUENTES MARTÍNEZ, ANGÉLICA MARÍA GÓMEZ, Y MARÍA CAMILA GONZÁLEZ.

Generar confianza y certidumbre en el sector privado será clave para que la inversión vuelva a subir y disipe las dudas que tienen algunas calificadoras de riesgos y analistas, a lo que sucederá durante el 2024.

En Colombia las proyecciones son optimistas con la inflación, que seguiría bajando durante el 2024 y cerraría entre el 5 % y el 6 %, dependiendo de a quién se le pregunte. Pero en el caso del crecimiento económico es más escaso el optimismo, pues se espera que sea un año de menor PIB, pero que cimente la estabilización del país para que en el 2025 podamos volver a crecer.

Por un lado, está el Ministerio de Hacienda, que actualizó sus proyecciones en el Plan Financiero, ese documento tan esperado en cada inicio de año porque muestra los cálculos y la hoja de ruta del Gobierno en temas económicos.

Allí, el ministerio actualizó su cálculo de inflación para el 2024 y lo pasó de 5,7 % a 6 %, y mantuvo su estimación del PIB para este año en 1,5 %, pero dejó de ser tan optimista sobre el 2023 y bajó esa proyección a 1,2 %; de hecho, el Dane reveló que fue del 0,6 % y ahora la expectativa es que este sea un año de mejor desempeño, al menos en el campo del PIB.

Más proyecciones

Esto coincide con los expertos y analistas que esperan que el 2024, aunque no será el año de la recuperación económica, sí sea de mejor desempeño que el 2023. La diferencia es que los números son más bajos que los del Gobierno. En la otra orilla está el Banco de la República, que prevé que este año la economía crecerá menos y llegará apenas a un 0,8 %.

¿Qué estaría detrás de este comportamiento? Los expertos consultados coinciden en que el descenso de la inflación –que hasta el momento ha sido más rápido de lo esperado, pero tiene un riesgo de alza en medio de las sequías causadas por el fenómeno de El Niño– ayudará a que el Banco de la República siga su camino de descenso de las tasas de interés hasta un número cercano al 8 % a final del año.

Eso ayudaría a darle un poco de confianza y financiamiento menos caro a los hogares y a las empresas. Pero como las medidas del banco central no se ven de inmediato en los créditos comerciales, la reactivación del consumo de los hogares –al que también ayudará el descenso de la inflación– se tomaría su tiempo.

Pero no todo se arregla con tasas de interés. Generar confianza y certidumbre en el sector privado será clave para que la inversión vuelva a subir y disipe las dudas que tienen algunos, como la agencia de calificación de riesgo Standard & Poor’s, para que hagan su parte en impulsar el crecimiento económico.

Para esto, dicen algunos analistas, serán necesarios anuncios y señales por parte del Gobierno como incentivar la construcción y acelerar la ejecución de obras de infraestructura pública, que además ayudarían a combatir el esperado aumento del desempleo por cuenta de la desaceleración económica.

En resumen, para Colombia el 2024 no será el gran año de la recuperación económica, pero sí el de lograr la estabilidad y sembrar las semillas del que será un mejor y más sostenible crecimiento para el 2025.