Amarilo

LA BIODIVERSIDAD EN LA AGENDA DEL SECTOR CONSTRUCTOR

Edición 103 | Viernes, Enero 10, 2025 - 15:49

En el marco de la COP16, Amarilo presentó su Política de Biodiversidad, que busca convertir a la empresa en líder en construcción positiva para la naturaleza al 2030.

La apuesta sostenible del sector constructor se encuentra estrechamente ligada a acciones en pro de la biodiversidad, un tema que tomó mayor relevancia a raíz de la organización de la COP16 en Cali, y que tuvo a la industria edificadora como protagonista.

“La biodiversidad y la sostenibilidad son conceptos que se mencionan a diario, y con los cuales la gente y los empresarios se han familiarizado. Sin embargo, en el caso de Amarilo, la agenda empezó a trazar este camino verde hace varios años, porque sabíamos que más que una moda, era un aspecto relevante de responsabilidad empresarial al que debíamos adelantarnos”.

Así explica Roberto Moreno, presidente de esta constructora, la apuesta de la compañía por el desarrollo sostenible, que se fortaleció cuando empezaron a trabajar el modelo de “Ciudad dentro de la ciudad” en varios megaproyectos, entre ellos Ciudad Verde en Soacha, al sur de Bogotá, donde el compromiso, además de beneficiar a las familias con un techo propio, también está en cuidar la flora y la fauna, entre otros.

Según la Unesco, Colombia es el país más biodiverso por kilómetro cuadrado, alberga el 14 % de las especies de plantas conocidas en el mundo, solo superado por Brasil, y 4.500 especies de aves aproximadamente, un tercio de las especies del mundo.

“Desde el comienzo tuvimos claro que el compromiso también consistía en empoderar a las comunidades y que tuvieran un sentido de pertenencia de sus viviendas, pero también de su entorno. Entendimos que esto no era opcional y por eso trabajamos duro hasta que hace ocho años creamos un Departamento de Sostenibilidad”, explicó el directivo.

Carolina Pacheco, directora de Derecho Ambiental, Sostenibilidad y Servicios Públicos de la empresa, anotó que “la estrategia de sostenibilidad se rige por 120 metas distribuidas en la vicepresidencia de la compañía, que incluyen la biodiversidad. Por eso, precisamente, en el marco de la COP16 presentamos nuestra Política de Biodiversidad, que se centra en convertir a la empresa en líder en construcción positiva para la naturaleza al 2030”.

Círculo virtuoso

Sobre la Política de Biodiversidad de la compañía en particular, la directiva destacó que apunta a “entender la condición de los ecosistemas, hábitats, especies y recursos naturales, y crea un plan para reducir el impacto, e impulsar la restauración, el mantenimiento y la promoción de la biodiversidad, a través de varios programas.

‘BioUrbanismo’, el primero de ellos, promueve la protección, la restauración y la funcionalidad ecosistémica en el diseño y la construcción de desarrollos urbanos, con una jerarquía de la mitigación. Se suma ‘CompensaInnova’, que vincula las compensaciones ambientales obligatorias y las inversiones voluntarias, y ‘Paisaje Sostenible’, que mejora la estructura y la conectividad ecológica en desarrollos urbanos; aquí, se vincula a las comunidades para lograr un paisaje con mejor estructura ambiental.

‘Inversiones Estratégicas en Ecosistemas’ se suma al listado. Con esta iniciativa la empresa espera contribuir a la conservación de ecosistemas en Colombia, a través de inversiones voluntarias; la política la complementan ‘Educa- Bio’, que promueve la conservación de la biodiversidad con la comunidad y educa a las partes interesadas, y ‘Relacionamiento Estratégico’, el cual implementa acciones de comunicación.

Pacheco destacó que “hemos aprendido a pensar sostenible desde la habilitación del suelo, pero también somos conscientes de que debemos saber quiénes habitan los espacios (especies, fauna, flora…), porque parte de nuestra responsabilidad es la convivencia con el ecosistema”.

Según Moreno, en el caso de Amarilo, el compromiso de la política quedó confirmado con varias proyecciones, entre ellas, “aumentar la biodiversidad en sus proyectos en un 10 % y conservar o restaurar 1.000 hectáreas de ecosistemas amenazados”. A esto le agregó la adquisición de 2.000 créditos de biodiversidad en el Banco de Hábitat Aguadulce, que apoyarán la conservación del bosque seco tropical, un ecosistema crítico en Colombia. “Se ayuda a la preservación ambiental y a la regulación hídrica en la cuenca del Río Magdalena, beneficiando territorios con escasez de agua, como Ricaurte (Cundinamarca)”, anotó.

Es la demostración de un compromiso que también involucra a la banca. Muestra de ello, para tener otros datos generales de contexto, fue el reciente anuncio del banco BBVA, que “ha movilizado más de 32 millones de dólares para el apoyo a iniciativas dirigidas al cuidado de la biodiversidad en Colombia.

Estos resultados se dan a tan solo tres meses de la emisión del primer Bono de Biodiversidad del sector financiero en el mundo, que la entidad presentó en alianza con la Corporación Financiera Internacional (IFC), miembro del Grupo Banco Mundial, y BID Invest”.

VARIOS FRENTES DE LA BIODIVERSIDAD

En el reciente Congreso Camacol Verde se llamó la atención sobre el impacto a la biodiversidad en el mundo: según el World Economic Forum (WEF), “más de la mitad del PIB global depende directamente de la naturaleza”. Además, “el deterioro de los ecosistemas naturales genera pérdidas a la economía global por más de U$5 billones al año”, señala Boston Consulting Group.

Llamado de Greenpeace. “Cada minuto que perdemos es una amenaza para nuestro futuro. No hay más excusas, no hay más tiempo. Si los líderes de la COP16 realmente quieren enfrentar la crisis climática y ecológica que atravesamos deben comenzar por proteger lo que mantiene vivo a nuestro planeta: su biodiversidad, ya que la naturaleza es nuestra principal aliada”: Estefanía Gonzalez, subdirectora de campañas de Greenpeace Andino.