• La regional Santander tiene la tarea de implementar y divulgar en Latinoamérica el proyecto de origen europeo BIO4EEB. La meta es transformar la industria mediante la aplicación de biomateriales en proyectos de construcción. 

El proyecto BIO4EEB (Biomateriales Aislantes para el Mejoramiento del Desempeño Energético de las Edificaciones) ya tiene un representante en Latinoamérica: Camacol Santander, la única organización de la región que está replicando, con 15 empresas de 10 países de la Unión Europea, esta iniciativa que desarrolla productos con bases biológicas. 

El proyecto cofinanciado por la Comisión Europea, que comenzó a ejecutarse el 1 de enero del 2023, se lleva a cabo en un periodo de cuatro años con el objetivo de probar los productos que dejaron ocho casos de estudio:  cinco ubicados en Lituania, España, Alemania, Republica Checa y Francia; y tres casos virtuales en Hungría, Bélgica e Italia. Esto permitirá contrastar los resultados obtenidos, con las expectativas del proyecto.

Como representante de BIO4EEB para Latinoamérica, Camacol Santander tiene la tarea de reproducir la iniciativa en la región y divulgar su evolución. Para ello, se ha enfocado en la transferencia de conocimiento y en la adaptación tecnológica con el fin de maximizar el impacto en términos de sostenibilidad y desarrollo de mercado en tres frentes.

Investigación y caracterización de productos con bases biológicas de la región:  esta tarea está enfocada en trabajar la economía circular a través de la identificación y caracterización de materiales de base biológica disponibles en el territorio. Este benchmarking regional, o análisis del desempeño de las empresas locales, busca explorar la generación de productos constructivos autóctonos que garanticen la reducción del carbono embebido.

Con el proyecto REBIO para la fabricación de paneles a partir de tallos de rosa, la regional ha evaluado los residuos agroindustriales. La meta técnica es validar las propiedades de aislamiento térmico y acústico de estos paneles para integrarlos en lo que rodea y delimita los edificios. Esto es fundamental para contribuir a las metas de eficiencia energética y los porcentajes mínimos de ahorro establecidos en la Resolución 0194 de 2025.

Difusión, representación y posicionamiento en Latinoamérica: el gremio actúa como embajador tecnológico para la construcción sostenible y asegura que la innovación de alto impacto llegue a la región. Para lograrlo, organiza sesiones de sensibilización técnica dirigidas a constructores, entidades públicas y centros académicos. El objetivo es acelerar la adopción temprana de materiales ambientalmente responsables. 

Viabilidad de comercialización y estudio de madurez de mercado: a través de la investigación, que va más allá de lo académico, se pretende evaluar la viabilidad económica de los biomateriales y la posibilidad de venderlos en grandes cantidades. Se está analizando la madurez del mercado para incorporar estos nuevos materiales.

De esta forma, la regional impulsa el cumplimiento de los objetivos de construcción sostenible en el país y trabaja para posicionar a Latinoamérica como un actor clave en la bioeconomía circular.

RECUADRO

El caso europeo

La innovación de BIO4EEB en Europa se centra en el desarrollo de un portafolio de soluciones de aislamiento que aprovechan recursos naturales y subproductos, con el fin de minimizar el desperdicio y las emisiones. Las principales innovaciones incluyen:

• Paneles aislantes de Posidonia oceánica. Las playas mediterráneas acumulan grandes cantidades de Posidonia oceánica varada, una planta marina considerada un residuo problemático, pero que BIO4EEB convierte en una oportunidad: se recolecta, se mezcla con otras fibras, y permite fabricar paneles y materiales aislantes.

   

• Pinturas protectoras contra fuego de origen natural. Usando quitosano (extraído de caparazones de crustáceos) y ácido fítico (presente en semillas), se crean recubrimientos especiales (pinturas) que protegen contra el fuego.

   

• Espuma SAFE-PUR: biopoliuretano de baja huella de carbono. Esta formulación de origen biológico con alto rendimiento, ofrece aislamiento térmico y acústico, mayor resistencia al fuego que las espumas tradicionales, y baja huella de carbono.

   

• Espumas de PLA: plástico de origen vegetal. El PLA (ácido poliláctico) se obtiene mediante la fermentación de almidón y azúcares vegetales. Su producción consume entre 25% y 55% menos energía que los plásticos derivados del petróleo, lo que representa un ahorro energético significativo.

   

• Marcos de ventana KLIMA-PUR. Ofrecen mejor aislamiento térmico gracias a una composición de 20 % a 30 % de materiales de origen biológico; 20 % a 30 % de contenido reciclado, y un diseño de menor densidad que maximiza el aislamiento.

• Fachadas prefabricadas. Sistemas listos para instalar que integran el aislamiento biológico y las ventanas sostenibles. Simplifican la renovación de edificios existentes y agilizan la construcción nueva, reduciendo tiempos de instalación.

DESTACADO

Con el proyecto REBIO, Camacol Santander evalúa la posibilidad de fabricar paneles a partir de tallos de rosa. La meta técnica es validar sus propiedades de aislamiento térmico y acústico en los edificios.