Vivienda es fuente de bienestar
La vivienda formal en Colombia es, sin lugar a duda, el primer instrumento de ascenso social, crecimiento económico, creación de empleo, protección del medio ambiente y desarrollo urbano y regional. Su capacidad de reactivación de corto plazo, su alta intensidad en la demanda de mano de obra de todo nivel de cualificación, su articulación con los demás sectores de la economía, su enfoque de desarrollo regional, son atributos que hacen de la vivienda un pilar de la reactivación y así lo ratifican los indicadores.
De acuerdo con el sistema de análisis georreferenciado de Camacol, Coordenada Urbana, las ventas de vivienda nueva alcanzaron en el primer semestre del año 112.995 unidades, 43 por ciento más frente al mismo periodo de 2020. De este volumen de ventas, la Vivienda de Interés Social (VIS) aportó 78.540 unidades, y los segmentos medio y alto, registraron ventas por 27.256 y 7.199 unidades, respectivamente. Asimismo, el inicio de las obras se ha reactivado de manera sostenida. En el primer semestre se inició la construcción de 77.216 viviendas, 40% más que el periodo anterior, lo que representa el inicio de construcción de 5,6 millones de metros cuadrados. Para el cierre de 2021, la Unidad de Investigaciones Económicas de Camacol prevé ventas de 232.300 unidades (160.980 unidades VIS y 71.315 no VIS), e iniciaciones por 166.016 unidades.
Este buen panorama también se ve reflejado en materia de empleo. El sector constructor es la segunda actividad económica que más genera puestos de trabajo en el país. Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) 391.000 empleos adicionales fueron creados en junio de 2021 comparado con el mismo periodo de 2020, lo que significó una participación en el empleo nacional del 7,1%, cifra que, adicionando los empleos indirectos, llega a 15%.
Todo esto quiere decir que el sector constructor está comprometido con la sostenibilidad económica y social del país, y que los hogares siguen priorizando la inversión en vivienda como fuente de oportunidades y desarrollo. Eso es un avance del mercado, un avance en la recuperación, pero sobre todo un avance con sentido social. La vivienda ha demostrado ser fuente de bienestar para el desarrollo de los hogares y por ende del país, y precisamente esa visión holística del bienestar y la vivienda será la que analizaremos el próximo 18, 19 y 20 de agosto en el Congreso Colombiano de la Construcción 2021, en donde no solo como sector y cadena de valor nos daremos cita, sino también líderes internacionales, nacionales y el alto Gobierno.
El momento que vive Colombia exige que el sector de la construcción y su cadena de valor sigamos siendo fuentes centrales de crecimiento económico, de generación de empleo, de construcción de sueños y por ende, de bienestar para todos.