Por: Mabel Quintero, Especialista en financiación de vivienda.

La juventud es un estado temporal, pero la necesidad de tener una vivienda es constante. De ahí la importancia de empezar a organizarse hoy para cumplir el sueño.

“Siempre es un buen momento para comprar vivienda”. Así lo mencionó el presidente de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), Guillermo Herrera, en una columna que publicó el diario económico La República, donde destacó que hay 113.000 oportunidades de compra para el 2024. Sin embargo, la pregunta de algunas personas es: “¿Por qué no logramos ver esa buena oportunidad?”. En realidad, creo que la respuesta es que consideran que es más fácil pagar arriendo y no se dan cuenta de que con el tiempo es cada vez más sencillo comprar.

No nos esforzamos por aprender un poco sobre la administración de nuestros recursos; tal vez ni siquiera sabemos qué necesitamos aprender al respecto. En nuestro paso por el jardín, la escuela, el colegio y la universidad, poco o nada nos enseñan sobre cómo administrar nuestros recursos y tristemente aprendemos por ensayo y error.

Dependiendo de tu nivel socioeconómico tienes, o no tienes, acceso a educación financiera; esta es una deficiencia visible en nuestra sociedad. Por eso, cuando comenzamos a ganar nuestro propio dinero suponemos que solo debemos gastarlo y olvidamos un uso crucial de nuestros recursos: la inversión. Una parte de nuestros ingresos debería destinarse a generar más dinero para construir un patrimonio personal.

La juventud es un estado temporal, pero la necesidad de tener una vivienda es constante a lo largo de la vida. Si no empiezas a organizarte hoy para tener tu propio hogar ¿cuándo lo harás? Recuerda que el tiempo es el mejor activo con el que cuentas y para empezar a capitalizarlo necesitas orden en tu bolsillo.

Primer paso

Hoy quiero compartir contigo el primero de varios pasos que considero indispensables para lograr tu objetivo de tener casa propia, o invertir en vivienda si lo vemos de otra manera: organizar tus finanzas personales.

Controla tus gastos para tener una perspectiva clara de tus finanzas diarias. Identifica los gastos conscientes, es decir, aquellos necesarios para vivir; por ejemplo, el mercado. Elimina los gastos inconscientes, o sea, aquellos en los que gastas sin pensar y que se pueden identificar porque si los quitas impactarían tu vida significativamente (por ejemplo, comprar café en la calle todos los días). Al eliminar los gastos inconscientes podrías ahorrar para invertir en tu futuro, garantizando tu tranquilidad y la posibilidad de obtener tu vivienda propia.

Después de identificar los gastos inconscientes, haz un presupuesto en una hoja de Excel o en un cuaderno, según tu preferencia. En este presupuesto debes listar tus ingresos fijos, ingresos variables y todos los gastos necesarios para vivir. Podrías fijar un excedente para destinar a inversión, como una vivienda en un proyecto sobre planos que se ajuste a tu capacidad de pago.

Si no cuentas con un excedente significa que estás sobreendeudado o que tus ingresos no son suficientes para tu estilo de vida. Es importante aprender a desarrollar una estrategia que te permita salir rápidamente de las deudas, pagando la menor cantidad de intereses posible.

Si de educación se trata, es clave aprender a generar más ingresos; no es una tarea fácil, pero créeme, ¡el que busca encuentra! Identifica qué necesita la sociedad y desarrolla habilidades para satisfacerla; con el tiempo obtendrás los frutos de este esfuerzo.

Es importante recordar que no debes sentirte mal si estás sobreendeudado o tus ingresos no alcanzan para lo que deseas; lo importante es que ahora reconoces el lugar en donde estás y comenzarás a tomar acciones para mejorar tu situación financiera.

Todo lo que nos sucede en la vida es parte de nuestro camino y nos brinda la oportunidad de aprender y crecer. ¡Estoy segura de que lograrás tus objetivos! Recuerda que no fracasa quien intenta y no logra… fracasa quien decide no intentarlo de nuevo.

Escanea este código QR y arranca a trabajar en el proyecto de tener TU CASA PROPIA, a través de un cuadro de control de gastos y presupuesto que te obsequia Mabel Quintero.