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materializó con la expedición del Decreto 1807 de 2014.Después de diez años vale la pena reflexionar sobre el efecto que el tema ha tenido en la práctica y su efectiva aplicación. Si bien es cierto que es una metodología robusta y acertada, desconoció la diversidad en cuanto a la capacidad administrativa y económica de la mayoría de los municipios, sus condiciones geográficas y la disponibilidad de información por parte del Estado para su aplicación.Respecto a la elaboración de los Estudios Básicos de Gestión del Riesgo (EBGR) –y para los fenómenos de inundación, remoción en masa y avenida torrencial a escalas 1:25.000, para suelo rural, y 1:5.000, para suelo urbano y de expansión urbana– se requieren, como mínimo, mapas de elevación digital que provienen de imágenes satelitales o drones (en el caso de la escala 1:5.000).También se necesitan modelaciones hidráulicas, de apiques (excavaciones), muestras de suelo y, en general, de un equipo profesional de alto perfil para su correcta elaboración, lo que se traduce en que los costos de formulación de un POT se incrementen dos o tres veces y en algunos casos, más del 1.000 %.Al 2023 teníamos 878 entes territoriales con sus POT desactualizados, que corresponden al 80 % del total, según el Informe del estado y avance del ordenamiento territorial en Colombia del Departamento Nacional de Planeación (DNP) 2021-2024. Es decir, estaban sin la incorporación correcta de la gestión del riesgo y aunque no se puede afirmar que esta es la única causa, indudablemente sí es una de las más relevantes.Esta política no se va a implementar sin disponibilidad de información a escalas adecuadas para el ordenamiento por parte del Estado y el resultado es que la ocupación del territorio no para por la falta de actualización de un POT. La diferencia es que se ocupa de manera desordenada e informal, y se siguen incrementando los asentamientos en territorios no seguros. Es por ello que desde el nivel nacional y el regional hay que incorporar los mecanismos tecnológicos y financieros para apoyar a los municipios en la elaboración de la base natural del territorio. Se requiere disponibilidad de información a escalas adecuadas para el ordenamiento por parte del Estado. De lo contrario, la ocupación del territorio se seguirá dando de manera desordenada e informal. Foto: Universidad del Rosario*El contenido de esta sección refleja el pensamiento de los autores. 73