Golpe a la economía, por cuenta del paro y los bloqueos
Informe sobre el impacto en el crecimiento económico nacional y las consecuencias para la industria edificadora.
El pasado 28 de abril comenzó el Paro Nacional, que a pesar de su carácter de protesta legítima llegó en algunos casos con bloqueos y desmanes, afectando la economía del país, que ya estaba golpeada por cuenta de la pandemia. De hecho, en varias ciudades la situación aún es compleja. Sobre el tema, el economista y exministro de Hacienda, Juan Carlos Echeverry, explicó que las consecuencias del paro han sido aparentemente más severas que las de la misma pandemia. "Según algunos empresarios, en este último caso sus compañías pudieron funcionar al 40%, e incluso, al 5%, mientras que en el paro esa dinámica apenas llegó al 20% o máximo, al 25%".
Echeverry agregó que "fue muy disruptivo para las cadenas de valor, ya que a mucha gente no le permitió importar los insumos que requerían y a otras personas tampoco les dio la posibilidad de llegar a sus lugares de trabajo, lo que muchas industrias sí habían hecho durante un año. Incluso, se obstaculizó la entrega de los productos a los clientes, lo que realmente fue muy perturbador" Según el Exministro, "la sensación de que la situación va a ser continua, como en Chile, puede haber sido más costosa que la pandemia, porque la gente piensa que el Estado se ha debilitado. Sin embargo, a pesar de que la suma de las dos cosas genera incertidumbre, soy optimista frente al segundo semestre".
Echeverry destacó que las ventas se han reactivado, la gente redujo los gastos y, en algunos casos, tiene liquidez, aunque reconoció que "también es cierto que hay muchas familias con hambre y que no pueden adquirir los productos que necesitan" Esto, anotó el exministro, "es una mezcla a la que también hay que agregarle los precios altos del petróleo, de los commodities y del café, pero creo que los indicadores positivos van a superar los negativos y, al final, el año tendrá un buen crecimiento, en parte, por el denominador tan bajo del 2020: deberíamos terminar el 2021 en un 6% o 7%, que es bueno, pero obviamente la clave es la situación fiscal y las fuen- tes de incremento, así como la confianza en el panorama político hacia el 2022, anotó.
Más pérdidas
En línea con esto, otros analistas han advertido cómo los diferentes sectores económicos perdieron cuantiosas sumas de dinero por cuenta de la situación. Por ejemplo, John Escobar, economista y docente de Administración y Finanzas de la Corporación Universitaria Iberoamericana, dijo el 8 de mayo que la suma ascendía a $20 mil millones diarios. Incluso, como una primera señal de lo que sería el balance de la situación, presagió que al final de ese mes Colombia estaría perdiendo casi $1,8 billones, lo que -agregó- "representaría un 2 % en el PIB. Recuperar esas cifras tomaría entre dos y cinco años", enfatizó.
Sin embargo, las cifras fueron más allá. Para Armando Montenegro, presidente de BGT Pactual, existe un impacto en la economía como consecuencia de los bloqueos y no de las manifestaciones pacíficas, que se puede medir en costos a corto plazo y se proyecta por el porcentaje del PIB, que, en su opinión, culminaría el año en 5%. "Si bien no alcanza a compensar lo perdido en el 2020 por la pandemia, es un buen índice de recuperación'" explicó Montenegro, quien agregó que profundizando en este tema, "desde el Gobierno y Fedesarrollo han calculado las pérdidas económicas por el paro entre $4 billones a $10 billones, aunque no se ha aclarado si dicho valor hace referencia a pérdidas de ingresos brutos o si son de días específicos donde los bloqueos fueron más críticos".
Impacto en la construcción Sobre el caso particular del sector constructor, Edwin Chiriví, vicepresidente Técnico de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), reveló que el sector constructor y sus actividades conexas generan el 15% de la mano de obra en todos los niveles de cualificación, convirtiéndolo en el tercer clúster de mayor capacidad de encadenamientos sectoriales generación de empleo del país.
El impacto se confirma con las cifras: al 9 de junio, el sector edificador sumaba pérdidas por $4,5 billones en inversión de desarrollos inmobiliarios, y de $2,2 billones en valor agregado para la economía en su conjunto, con una caída en las ventas de $2,3 billones para 36 sectores productivos y más de 170 líneas de actividad económica que abastecen con insumos y materiales, donde predominan medianas y pequeñas empresas.
"Actualmente, nuestra industria ocupa 1,6 millones de trabajadores de forma directa y 2,2 millones en los sectores que conforman el canal de abastecimiento comercial, industrial y de servicios de la construcción, que representan 36 sectores económicos, es decir, el 54% del aparato productivo del país", anotó Chiriví, con base en un informe del Gremio.
Adicionalmente, más de 472 mil trabajadores directos del sector no pudieron realizar sus actividades laborales y, de paso, pusieron en riesgo el sustento de sus hogares", dijo el Directivo, quien agregó que luego del proceso de reactivación a lo largo del último año, la coyuntura ha tenido un impacto transversal en la dinámica de la actividad, asociado a una fuerte presión al alza en costos directos de insumos de construcción y desabastecimiento de materiales, insumos y materias primas.
A esto hay que agregarle una restricción o limitación en el acceso al canal de crédito para los proyectos, particularmente en medianas y pequeñas empresas, y una alta carga de trámites y de ineficiencia institucional a nivel local y nacional soportado en demoras y restricciones de procedimientos.