Page 76 - REVISTA URBANA 88
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HOMENAJE
                                                          HOMENAJE









                         Mauricio Déver,







                              EL HOMBRE QUE LE APOSTÓ


                 A UN GREMIO INNOVADOR Y FUTURISTA






                        ingeniero  bogotano,  de   Un ser humano magnífico, positivo, con buen sentido del humor,
            ESTE padre canadiense y ma-       impulsor de cambios y convencido del reto de consolidar el
             dre colombiana, marcó hitos en el desa-
             rrollo y consolidación de Camacol como   gremio, así lo recuerdan colegas, colaboradores y familia.
             gremio.  Su  paso,  inicialmente  corto  y
             como préstamo de la firma Cuellar Se-  crisis que atravesaba el gremio a raíz del cambio de gerencia y organizar por primera vez en Bogotá la
             rrano Gómez, donde trabajaba, se exten-  Asamblea Nacional. “El fue el que se inventó las asambleas en Girardot para reunir la gente presencialmen-
             dió por 25 años, que fueron el reflejo de   te y que se tuviera una sensación de gremio y unidad para trabajar juntos. Eso, para la época, era un tema
             un hombre que se gozaba la vida, su tra-  innovador. Luego, en la quinta asamblea quiso hacer una muestra de proveedores de la construcción y de
             bajo, familia y todo lo que hacía, con un   allí salió Expodiseño y Expoconstrucción, que lideró junto a Harry Child. Pero, además, impulsó los infor-
             positivismo abrumador que contagió a   mes de oferta y demanda que al principio se hacían en máquina de escribir y luego tocaba fotocopiarlos
             sus colaboradores y a una seccional Ca-  para los 500 afiliados”, recuerda Paula.
             macol  Bogotá,  hoy  regional  Bogotá  &   Además, gracias a ese carisma jovial, tranquilo, de buen humor y siempre preocupado y atento a las per-
             Cundinamarca, que dirigió con pasión y   sonas, rápidamente se ganó el amor de los afiliados, pero, sobre todo, de sus colaboradores y colegas.
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             que es el legado para un gremio que hoy   “En mi corazón siempre tendré a un Mauricio alegre, divertido, comprometido y muy gremial, ense-
             le rinde un homenaje póstumo, recono-  ñándome mucho. Fue quien me recibió cuando llegué a la gerencia de Camacol con los brazos abier-
             ciendo lo grande de su huella.    tos y desde la primera junta me felicitó, creándose una relación entre los dos de colegaje y amistad. En
                                               cada junta había de parte de él una conclusión y orientación de lo que yo debía mejorar, o el gremio,
             Su paso por Camacol               en la vía de atender mejor a los empresarios”, señala Sandra Forero Ramírez, presidenta de Camacol.
                                               Pero un rasgo característico era su especial preocupación por los demás. “No olvidaré los detalles de
             Si algo puede definir el recorrido de Mau-
             ricio Déver por Camacol, fue su gran amor
             por  el  sector  constructor,  que  inició  en
             Chicago  University  of  Illinois,  donde  se
             graduó como ingeniero y tuvo la oportu-
             nidad  de  realizar  encuentros  y  semina-
             rios sobre construcción.
              “Mi papá era parte de Cuellar Serrano
             Gómez y el doctor Serrano le apostó a
             crear un gremio de manera profesional y
             justa. Por eso, y gracias a las excelentes
             relaciones públicas que el tenía, fue es-
             cogido para apoyar su consolidación, y
             hacerlo  en  calidad  de  profesional  en
             préstamo  por  dos  años,  pero  hizo  tan
             bien la tarea, que se quedó 25”, recuerda
             su hija Paula Déver.
              En 1974, cuando ingresó a Camacol, Dé-
             ver  encontró  retos  inmensos:  superar  la
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